El uso tradicional de La Laguna, como el de otras charcas, como no podía ser de otra manera, su condición está directamente e íntimamente ligada al sector agrícola- ganadero. De tal modo que sus aguas eran un punto de encuentro para el alivio del ganado: ovino, caprino y vacuno principalmente. Recordemos que Higuera de la Serena desde 1494 forma parte de la Real Dehesa de la Serena, integrada por 18 villas que siempre destacaron por la gran calidad de sus pastos en la Península Ibérica, muy apetecibles para los grandes rebaños trashumantes invernales.
Aunque su aureola es de un calado mucho más amplio y profundo: como zona de pesca, caza o de lavadero de la ropa, ya que hasta allí se desplazaban algunas mujeres higuereñas, con sus paneras para lavar la ropa.
En su entorno inmediato más próximo, destacan fecundas huertas provistas de pozos, albercas y alguna que otra noria. Y como propio de estas latitudes se manifiesta, la triada mediterránea, representadas en el cultivo de la vid, el olivar y tierras para el cereal.